El misoprostol no requiere de ningún procedimiento quirúrgico. En la mayoría de los casos, puede seguirse su tratamiento en cualquier hogar promedio.
El fármaco suele utilizarse junto a una combinación de mifepristona. Esta pastilla bloquea la hormona progesterona que el cuerpo necesita para que continúe el embarazo. El misoprostol, se toma de 24 a 48 horas después, lo que causa un vaciado del útero.
Pero, ¿qué sucede si no podemos acceder a ambos medicamentos? La OMS afirma que si la mifepristona no está disponible, se puede usar misoprostol por sí solo. El misoprostol es un medicamento más extendido que su contraparte, debido a los elevados costos de la mifepristona.
Su uso ha reducido las emergencias por abortos inducidos en el mundo, ya que es un método más sencillo y que presenta menores riesgos que otras alternativas para inducir el aborto. Por supuesto, no existe tal cosa como un tratamiento milagroso y compatible con todos los tipos de cuerpos. Las mujeres con trastornos hemorrágicos, problemas de glándulas suprarrenales o que estén tomando medicamentos.
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